TRES CANTARES ENVIADOS
A UNAMUNO EN 1913
Señor, me cansa la vida,
tengo la garganta ronca
de gritar sobre los mares,
la voz de la mar me asorda.
O tú y yo jugando estamos
al escondite, Señor,
o la voz con que te llamo
es tu voz.
Por todas partes te busco
sin encontrarte jamás,
y en todas partes te encuentro
sólo por irte a buscar.
A UNAMUNO EN 1913
Señor, me cansa la vida,
tengo la garganta ronca
de gritar sobre los mares,
la voz de la mar me asorda.
O tú y yo jugando estamos
al escondite, Señor,
o la voz con que te llamo
es tu voz.
Por todas partes te busco
sin encontrarte jamás,
y en todas partes te encuentro
sólo por irte a buscar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario